ENCOMIENDA PARA LAMARQUE
La impresora dio inicio a la secuencia de comandos. Luces de colores se encendían y apagaban en un contrapunto bien afinado. El rodillo de alimentación comenzó a eructar páginas por la fina muesca disimulada en la parte superior hasta que la bandeja quedó repleta. Cumplida su tarea, quedó inmóvil y una lucecita roja se encendió en el tablero frontal. Lucio analizó el resultado del trabajo. Las páginas enormes con dimensiones de outdoor tenían un círculo negro del tamaño de una palangana encima de la figura que debía aparecer impresa. Aun así, podía atisbar detalles del paisaje invernal por debajo de la inesperada cobertura. Vio la escarcha, las puntas desnudas de los pinos, un depósito de ladrillos carcomidos y un obelisco en el fondo. Era un idílico paisaje rural, que le recordó las coloridas telas de los impresionistas. Después de una rápida revisión, descubrió la causa del problema. Un desperfecto en los engranajes hacía que el dispositivo liberase más tinta que la neces...